TEMA:
La
unión y los espacios personales.
OBJETIVOS:
- Reflexionar acerca de
los espacios personales de una relación afectiva, noviazgo o matrimonio.
- Asumir el compromiso
afectivo de una manera sana, un amor sin apegos, que genera dependencia nociva.
- Invitar a cada
participante a construir una relación de amor que le dé libertad al otro para
que sea lo que es.
DESCRIPCIÓN:
A
partir de un pensamiento de Khalil Gibrán, analizar las condiciones para
establecer una relación de amor, sana y madura.
PROCEDIMIENTOS:
1.
Entregar a cada participante el texto tomado de «El profeta»
de Khalil Gibrán.
2.
Cada participante responderá:
- Cómo interpreta la
frase: «Dejad que haya espacios en vuestra compacta unidad».
- Cómo interpreta la
frase: «No hagáis el amor con una atadura».
- ¿Qué opina de los celos
obsesivos que una persona siente hacia otra y que genera en la relación
conflictos, dificultades, discusiones? ¿Considera esto amor?
- Qué significa la frase:
«Dad vuestros corazones, pero no en prenda».
3.
Señale tres enseñanzas que le deja este ejercicio.
4.
Conclusiones:
Luego Altamira habló
de nuevo y dijo: - «Y, ¿qué no dices del matrimonio, maestro?»
Y él respondió diciendo:
- «Habéis nacido juntos permaneceréis para siempre
jamás,
- Estaréis juntos cuando las blancas alas de la
muerte dispersen vuestros días.
- Sí; estaréis juntos aun en la callada memoria de
Dios, pero dejad que haya espacios en vuestra compacta unidad. Y dejad dancen
entre vosotros. Amaos el uno al otro, pero no hagáis del amor una atadura:
dejad más bien que haya un mar meciéndose entre las cosas de vuestras alamas.
Llenaos
mutuamente las copas, pero no bebáis de una sola copa. Compartid vuestro pan, pero
no comáis de la misma hogaza. Cantad y danzad juntos y estad gozosos, pero
nunca conservad cada uno vuestra soledad.
Hasta
las cuerdas del laúd están solas aunque vibren con la misma música.
Dad
vuestros corazones, pero no en prenda.
Porque
solamente la mano de la vida puede contener vuestros corazones.
Y
estad juntos, pero no demasiado juntos, porque las columnas del templo guardan
distancias, y el roble y el ciprés no crecen el uno a la sombre del otro».
PISTAS
PARA LA REFLEXIÓN:
Una relación amorosa es
la posibilidad para lograr unión; sin embargo, dicha unión no debe llevar a que
los miembros de una pareja se despersonalicen. Cada uno debe mantener su propia
identidad, aportando de si mismo elementos valiosos de su ser único y personal.
De igual manera, cada uno debe hacer valorar sus espacios personales, su propia
intimidad como corresponde a su yoicidad, que se verá engrandecida en el
compartir con el otro.
«Jesús dijo que nos
amásemos y no que nos amasemos; nunca dijo que nos volviéramos masas uniformes.
Crecer en una relación es tener la posibilidad de estar junto a ti, siempre
siendo yo.
- A los padres de familia
debe dejarles la enseñanza de aprender a respetar la intimidad de sus hijos;
allí empezarán a experimentar la sensación de adultez en sus espacios personales.
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Gracias por capacitarse en la Escuela de Padres del Psicologo OSCAR SUAREZ