El tan polémico caso en que el estadounidense Timothy Alan Livingston, acusado de abusar
sexualmente de dos niñas, de 12 y 13 años en Medellín, y quien abandonó el país
la semana pasada, plantea la
responsabilidad de los padres de las menores involucradas.
Que el norteamericano fue el culpable de los
abusos y que debe responder no tiene ninguna discusión, pero de ahí a pensar
que los padres de las menores fueron inocentes frente a los hechos, no es
admisible para ninguno que sea padre de familia.
No puede concebirse que dada la edad de las
niñas 12 y 13 años puedan sus padres dejarlas pasar una noche, no sé cuántas
noches, en la casa de un hombre soltero y adinerado. No creo que se pueda
considerar como una decisión responsable de padres de adolescentes el día de
hoy.
Por lo tanto, cabe la pregunta: ¿ESTÁN
EXENTOS LOS PADRES DE ESAS NIÑAS DE ALGUNA RESPONSABILIDAD?
Para este psicólogo que lleva más de 12 años
entrevistando a niños abusados sexualmente en Cámara de Gessel, y que además
realiza charlas y talleres con padres de familia no puede desconocerse la
responsabilidad de los padres en este hecho y en otros.
Debe castigarse al responsable pero no se
puede desconocer la omisión en la que pudieran haber incurrido los padres y
cuidadores.
He dicho en mis charlas y conferencia que El
estado se alegra cada vez que pueda sancionar ejemplarmente a un abusador, pero
que lo que pretende las políticas contra el abuso sexual infantil no es
llevar muchos niños y abusadores a los estrados judiciales sino antes por el
contrario que mientras menos niños sean abusados porque los padres y los entes
encargados de ello asi lo hayamos evitado seremos un estado más fuerte.
La lucha contra el abuso no solo debe darse
en el aparato judicial sino en las Redes que hagamos de prevención en la que
cada dia fortalezcamos a los padres de familia en su papel de proteger y cuidar
a sus hijos.
Por esa razón que un medio noticioso mencione
la responsabilidad de los padres no se puede tomar como que le está quitando la
responsabilidad directa al criminal.
La ley 1098 de 2006 también llamada CÓDIGO DE
INFANCIA Y ADOLESCENCIA, en su artículo 10 considera que existe una cor
responsabilidad entre estado, familia y sociedad.
No sé cómo llamar a los papas de unas niñas
de 12 y 13 años que les parece lo más normal del mundo que sus hijas no
pernocten en sus casas, sino que lo hagan en la habitación hombre mayor y que
además regresen a sus casas contando una suma de dinero de dudosa o conocida
procedencia
En esta época están sucediendo hecho nuevos e
interesantes: Existe el maltrato infantil tanto como en los años anteriores,
pero en una nueva modalidad: Ya no se presentan con tanta frecuencia el que la
señora queme la mano de la niña que le robo una moneda de 500 pesos. Claro que
la locura todavía existe y no falta la loca o el loco que todavía lo hace. Pero
en grado menor.
Hoy día se presenta más el maltrato infantil
por negligencia, el cual también sanciona la ley. Se presenta más el que los
padres llevan a sus hijos a la escuela con piojos, no revisan sus tareas
escolares, los dejan con vecinos y conocidos, los dejan encerrados con tal de
irse a bailar, no les importa si inician su vida sexual con personas mayores,
no revisan sus celulares, no previenen el consumo de sustancias psicotrópicas,
no les importa de dónde sacaron un dinero que portan, y en fin la lista es
larga de la negligencia de los padres.
Por esa razón tiene mucho sentido lo que
manifiesta el medio noticioso de la responsabilidad de los padres en el hecho.
En un análisis desprovisto de cualquier sesgo
debe reivindicarse la responsabilidad parental: Los padres debemos cuidar y
proteger a nuestros niños.
Son nuestros niños, indefensos, ingenuos e
inocentes. Somos nosotros los que debemos cuidarlos, es nuestra responsabilidad
indelegable.
Cuando son dos menores de edad involucradas
en estas actividades de comercio sexual no se les llama prostitución sino EXSCNA
Explotación sexual y comercial de niños, niñas y adolescentes, PORQUE DETRÁS
DEL PRESUNTO NEGOCIO EXISTEN PERSONAS ADULTAS con ESTAS NIÑAS QUIENES
LAS ESTAN INSTRUMENTALIZANDO
Serán sus padres
Dios quiera que no
